Cada 20 segundos muere una persona por causa de tuberculosis en el mundo según datos de 2014. Dicho de otro modo, unas 4.000 mueren al día por esta patología. La tuberculosis es la enfermedad infecciosa que más mortalidad provoca en todo el mundo, superando a la del VIH.
Sin embargo, en estos momentos podríamos estar hablando de uno de las avances más relevantes hasta el momento, o al menos, sí el más prometedor: una vacuna eficaz contra todas las formas de tuberculosis tanto en adultos como en niños y que, además, tendría sello español.
La sociedad científica lleva años buscando la fórmula mágica en forma de una vacuna que pueda prevenir la enfermedad. Hasta ahora, existe una vacuna llamada BCG eficaz contra las formas más graves de la enfermedad en niños, pero que no sirve para la prevención de la tuberculosis pulmonar en adolescentes y adultos -la forma más común de esta patología infecciosa-.
Un equipo de investigadores de la Universidad de Zaragoza, junto con la farmacéutica Biofabri, está desarrollando una vacuna candidata contra la tuberculosis llamada MTBVAC. En enero de 2018, la investigación comenzará su segunda fase con la realización de dos nuevos ensayos clínicos: uno con unamuestra de 99 recién nacidos y otro con 120 adultos. Ambos trabajos se desarrollarán durante dos años y medio en el Centro de Investigación en Vacunas de Sudáfrica (SATVI), en Worcester, un pequeño núcleo con alta incidencia de tuberculosis. Sudáfrica es una de las zonas más afectadas por esta enfermedad, según datos publicados en 2014. Cada día en aquel país se diagnostican 1.400 nuevos casos.
“Pasar a la fase 2A supone un paso de gigantes en la investigación“, asegura a EL MUNDO Carlos Martín, investigador principal del estudio. Lo que se va a estudiar ahora, añade el experto, es en qué dosis hay que administrar la vacuna (que proteja pero sin causar efectos secundarios).
El principio de esta investigación comenzó en el año 2013. Los primeros ensayos clínicos en Fase 1A de esta vacuna en humanos comenzaron con 36 voluntarios adultos sanos entre 18 y 45 años en el Complejo Hospitalario de la Universidad de Vaudois en Lausana (Suiza), concluyendo en junio de 2014. Un año después, en septiembre de 2015 arrancaron nuevos ensayos clínicos sobre 36 recién nacidos y 18 adultos en Sudáfrica, un país endémico, para estudiar su seguridad y capacidad inmunogénica.
Los buenos resultados de estos dos trabajos, que concluyen por completo este mes de diciembre, han permitido preparar la ya citada fase 2A. “Aunque estamos a la espera de los resultados de inmunogenicidad (eficacia y seguridad) que llegarán a final de año, ya sabemos que es una vacuna segura, porque tanto los recién nacidos como los adultos incluidos en dicho ensayo, llevan ya un año desde la última vacunación sin ningún problema”, explica Martín. Es decir que la vacuna ya es segura.
Por todo ello, en esta vacuna hay puestas muchas esperanzas ya que “proviene de una cepa Mycobacterium tuberculosis aislada de un humano, mientras que la vacuna existente, la BCG proviene Mycobacterium bovis que procede de una vaca”. Pero no sólo eso, sino que además, y según señalan desde la farmaceútica, “la vacuna BCG con más de 90 años ha perdido más de 100 genes, entre ellos dos que codifican para proteínas más inmunogénicas, es decir que son las que dan mayor inmunogenicidad mientras que la MTBVAC sí las tiene”.
El trabajo cuenta con el apoyo de los prestigiosos organismos internacionalesdedicados al desarrollo de nuevas vacunas contra la tuberculosis que “han considerado que nuestro proyecto -MTBVAC- tiene un alto impacto social”, afirmó su parte Esteban Rodríguez, el consejero delegado de la farmacéutica en la presentación de este proyecto, este jueves en Vigo. Y es que esta nueva fase (2A) de la investigación ha sido posible gracias al espaldarazo económico de 12 millones de euros que acaba de conseguir tanto de la Unión Europea como de Estados Unidos.
Por un lado la Cooperación de Europa y los Países en Desarrollo sobre ensayos clínicos, en colaboración con la Tuberculosis Vaccine Iniciative (TBVI), aportarán en conjunto 5.500.000 euros para el ensayo en recién nacidos. Por otra parte, el ensayo clínico en adultos con un valor de 5.700.000 dólares será financiado por el Programa de Investigación Médica Dirigido por el Congreso de Estados Unidos, en colaboración con AERAS, organización norteamericana sin fines de lucro que desarrolla nuevas vacunas eficaces contra la tuberculosis.
En declaraciones a este periódico, Rodríguez ha afirmado que “la OMS se plantea unos hitos de control de enfermedad para 2035 pero sin nueva vacuna eficaz, no se podrán alcanzar. Sin embargo, nosotros estamos en la ‘cresta de la ola’, en la vanguardia mundial del desarrollo de vacuna contra la tuberculosis”. Porque a pesar de que “hay estudios en fases más avanzadas, esta vacuna es la que más esperanza genera”, concluye Martín.